Entre el 8 y 11 de septiembre, en Atenas, se llevó a cabo el Congreso Mundial de ESOMAR 2024: “Mente, mito, máquina”. El evento contó con presentaciones de marcas internacionales como Microsoft, PepsiCo, Meta, The Coca-Cola Company, Nestlé, BBC, Amazon, entre otras, además de las principales empresas de investigación de mercado.
El congreso abordó cómo conocer mejor a los consumidores para generar conexiones más profundas y el papel del storytelling en la transmisión de datos. En representación de AIM, asistió Consuelo Valenzuela, socia directora de Rubik, que se mostró especialmente interesada en las nuevas tendencias tecnológicas, como la inteligencia artificial, y cómo están transformando la industria a nivel global. “Se conversó desde la relevancia de las marcas frente a los consumidores hasta los desafíos con un consumidor menos conectado con las marcas, además de las nuevas herramientas que están apareciendo y todo lo que implica la adaptación a la nueva era de los datos”, expresó.
La participación de Consuelo también fue una oportunidad para visibilizar la investigación de mercado chilena. “Gran parte de mi participación estuvo relacionada con visibilizar a la AIM y a la industria en Chile. En ese sentido, lo que más generaba interés fue conversar sobre las reflexiones en torno a la industria e intercambiar visiones sobre el rol y rumbo de la investigación de mercado”, mencionó.
Opinión pública: el rol de las encuestas ante un escenario cambiante
En su rol de representante de WAPOR en Chile, Paulina Valenzuela, socia directora de Datavoz, asistió a la conferencia anual de la organización: “El alma de la investigación de la opinión pública: Libertad, calidad y humanidad”, realizada entre el 28 y 31 de julio, que reunió a investigadores y empresas de estudios de opinión pública de diversos países.
En el encuentro se discutieron temas clave como las transformaciones en la realización de los estudios de opinión pública, entre ellos la irrupción de paneles web, la caída en las tasas de cooperación y el uso de la inteligencia artificial (IA). “Un aspecto que está generando mucha discusión es el uso masivo de paneles y los modos web de encuestaje que se han ido masificando por su rapidez y bajo costo, en reemplazo de los clásicos modos presenciales y telefónicos. Porque para estos aún no existe una teoría fundada que le de sustento a sus resultados, en términos de confiabilidad y precisión estadística”, explicó Paulina.
Asimismo, se abordaron temas relativos a los escenarios políticos de los distintos países y cómo estos impactan en la realización de estudios de opinión pública. Frente a esto, para Paulina es clave entender el rol que tienen las encuestadoras. “Las encuestas son un mecanismo que le da voz a los ciudadanos, con foco en su libertad e independencia, asumiendo la responsabilidad que tiene su producción especialmente en tiempos de conflicto social”, apuntó.
Aprendizajes para la industria local
Las directoras de AIM coincidieron en que las tendencias internacionales discutidas entre sus pares de WAPOR y ESOMAR ya se observan en Chile. Respecto a las nuevas tecnologías y sus transformaciones para la industria, tanto la irrupción de la IA como la creciente popularidad de los paneles web están presentes en la forma en que se realizan los estudios en el país.
Estos avances tecnológicos traen consigo desafíos éticos y metodológicos que requieren un análisis más profundo. “Este es un gran desafío para los investigadores locales, quienes no están solos, pues a nivel mundial las preocupaciones son las mismas, sólo se requiere mayor experimentación y compartir dichas experiencias para generar conocimiento”, comentó Paulina Valenzuela.
Consuelo Valenzuela señala que en la industria local también está presente la importancia de implementar estrategias centradas en los consumidores, uno de los temas discutidos con sus pares en ESOMAR. “Hace tiempo venimos conversando de esto, pero pocas veces nos detenemos a pensar qué es lo que eso realmente implica. Es muy difícil, sino imposible, tener al consumidor al centro si dejamos la investigación profunda de lado y si no nos detenemos a comprender de verdad qué es lo que necesitan”, concluyó.