Un 73% de los chilenos ha sentido niveles de estrés que afectan su vida cotidiana, según reveló el estudio “Día Mundial de la Salud Mental 2024” publicado por Ipsos. Esta encuesta, que consultó a más de 23 mil 500 personas de 31 países, se realizó en el marco del Día Mundial de la Salud Mental, celebrado el 10 de octubre.
La percepción de estrés en Chile ha aumentado significativamente con el paso del tiempo, explica Karla Zamora, líder de Estudios Cualitativos en Ipsos Chile. “Vamos subiendo nuestro nivel de estrés, al punto de interrumpir nuestra vida cotidiana, a niveles muy altos comparados con el promedio global. Somos un país que se siente estresado”, subrayó.
Además, el estudio reveló que el 82% de los chilenos cree que la salud mental es tan importante como la física, superando el promedio mundial (76%) y situando a Chile como uno de los países del continente con mayor adhesión a esta idea.
Si bien el estudio no incluye una definición específica de estrés, este se entiende como la respuesta mental o física frente a un estímulo externo, que puede ir desde cumplir con una fecha límite en el trabajo hasta enfrentar un diagnóstico médico. A diferencia de otros fenómenos como la ansiedad, que es la respuesta del cuerpo al estrés y puede presentarse incluso sin una amenaza real, el estrés está directamente relacionado con factores externos que desencadenan esta reacción.
¿Qué nos estresa a los chilenos?
Existen diversos factores que explican el aumento en la percepción de estrés en Chile. Según la última encuesta Pulso Ciudadano de Activa Research, el 46,5% de los ciudadanos considera a la delincuencia como el principal problema del país y parte de la población no observa con buenos ojos la situación económica: el 42,8% la califica como mala o muy mala.
Zamora argumenta que la percepción de inseguridad es uno de los principales factores de estrés. “Hay diversas razones detrás de esto: la situación económica, la dificultad de llegar a fin de mes, la inseguridad laboral, y la percepción de inseguridad en sí, que lleva a una inestabilidad emocional. Hay quienes incluso han dejado de salir por la tarde debido a esto”, apuntó.
En el ámbito de la salud, el 38% de los chilenos cree que el sistema prioriza más la salud física que la mental, lo que también genera estrés. “El acceso a la atención en salud mental es limitado, y no todos pueden pagar por consultas psiquiátricas”, agregó Zamora.
La generación Z: el segmento más afectado
El estudio de Ipsos reveló que la generación Z es el grupo más afectado por el estrés. Un 55% de ellos declaró haber experimentado estrés que impacta su vida diaria, un porcentaje superior al de otras generaciones: Millennials (38%), Gen X (38%) y Baby Boomers (28%).
La líder de Estudios Cualitativos de Ipsos Chile subraya que los jóvenes no sólo son más conscientes de la importancia de la salud mental, sino que también enfrentan contextos desafiantes. “Fenómenos como la precarización laboral, la inestabilidad social y el impacto de las redes sociales son algunos de los factores que afectan a este grupo. Ver constantemente vidas aparentemente perfectas en redes sociales puede desencadenar una frustración que se convierte en síntomas depresivos”, explicó.
3 recomendaciones: un llamado a la conciencia
Para poder enfrentar el aumento en la percepción de estrés, Karla Zamora sugiere tres medidas clave:
- Fomentar la empatía en nuestros entornos, ya que este problema es tan importante como cualquier enfermedad física.
- Establecer políticas públicas enfocadas en la salud mental que ofrezcan más herramientas para gestionar estos problemas.
- Las empresas deben priorizar el bienestar de sus trabajadores, creando ambientes laborales más saludables.
