El pasado 20 de enero se publicaron los resultados del proceso de selección universitaria, el más masivo hasta la fecha. De los 189.983 estudiantes que participaron, 158.219 fueron seleccionados en alguna de las 45 universidades adscritas al sistema. Esta cifra representa un aumento del 5,1% en el total de admitidos respecto al 2024.
Entre las principales tendencias observadas este año destaca el incremento de personas mayores de 60 años que ingresan a la educación superior, así como el aumento del 43% en las solicitudes para rendir la PAES en condiciones especiales. Datavoz, empresa socia de AIM, analizó los principales datos del proceso de selección 2025, identificando tendencias y brechas.
Persistencia de las brechas educativas
Los resultados de la PAES 2025 evidenciaron brechas significativas en el desempeño académico según el tipo de establecimiento de origen de los estudiantes. La Región Metropolitana lidera los puntajes en todas las pruebas, superando los promedios nacionales, mientras que la diferencia entre colegios particulares pagados, subvencionados y municipales sigue siendo notable.
El 61,3% de los estudiantes provenientes de colegios privados se ubicó en el 20% más alto de puntajes a nivel nacional. En contraste, sólo el 16,8% de los egresados de colegios subvencionados y el 9,5% de los municipales lograron este nivel de desempeño. Además, de los 100 colegios con mejores puntajes promedio, 98 son particulares pagados, mientras que apenas uno es subvencionado y otro es público.
De acuerdo a Paulina Valenzuela, socia directora de Datavoz, estos datos reflejan cómo las desigualdades estructurales siguen marcando el acceso a oportunidades educativas. “Si bien hubo un aumento en el puntaje promedio respecto de 2023, no podemos ignorar que más de la mitad de los estudiantes de colegios particulares pagados se ubican en el quintil más alto de la distribución de puntajes, en comparación con sólo una minoría de aquellos provenientes de establecimientos públicos”, apuntó.
Tendencias en las áreas de estudio
El análisis de la distribución de postulaciones y seleccionados por área de estudio revela tendencias significativas: una de las más destacadas es el aumento de mujeres aceptadas en carreras tecnológicas. Gracias a la ampliación del programa Más Mujeres Científicas (+MC), el número de seleccionadas en estas áreas creció un 20,7%, pasando de 7 mil quinientas en la admisión 2024 a más de 9 mil en 2025.
Por otro lado, las carreras del área de la salud siguen siendo las más demandadas, con un crecimiento del 5,5% en el número de seleccionados. Sin embargo, el área de humanidades experimentó la caída más pronunciada, con una disminución del 14% en los postulantes seleccionados.
Los desafíos que deja el proceso de admisión 2025
Paulina Valenzuela destaca el avance en la incorporación de mujeres en STEM, pero también advierte sobre los desafíos pendientes. “Si entendemos la educación como el medio a través del se equiparan para la población las condiciones de desarrollo, estos datos nos recuerdan que queda un camino largo por recorrer. No sólo el acceso a educación debe estar garantizado, sino también que esta sea de calidad”, enfatizó.
Otro factor determinante en la toma de decisiones de los estudiantes sigue siendo el costo de la educación superior. Según la Subsecretaría de Educación Superior, los aranceles anuales reales oscilan entre un millón y hasta los doce millones de pesos, dependiendo de la institución y la carrera.
No obstante, los aranceles de referencia utilizados para determinar el financiamiento máximo por becas y créditos estatales son significativamente más bajos que los reales. Esto obliga a muchos estudiantes a cubrir la diferencia con recursos propios o mediante otros beneficios estudiantiles. La cobertura de estos aranceles varía entre el 16% y el 100%, dependiendo de la universidad y el tipo de programa académico.
En cuanto a los esfuerzos futuros para mejorar la accesibilidad y calidad educativa, Paulina subraya la necesidad de un compromiso conjunto. “La equidad se sustenta en la igualdad de oportunidades, y es responsabilidad de todos, autoridades, familias y educadores, velar por ello”, concluyó.