La empresa de investigación de mercados Ipsos lanzó su más reciente informe “Claves Ipsos”, para lo que encuestó 800 personas con el fin de identificar los principales problemas y preocupaciones de los chilenos y describir la opinión sobre temas de seguridad pública en el país.
Crisis Alimentaria
Ante la posibilidad de una crisis alimentaria por desabastecimiento y alza de precios de algunos productos, un 90% de las personas consultadas dice estar enterada de esta noticia y solo un 10% no sabe del tema.
En relación a los tipos de alimentos que se perciben que están en riesgo de desabastecimiento y alza de precios, las y los chilenos se inclinaron principalmente por los aceites vegetales y el trigo/cereales en general (ambos con 74%).
Sobre las razones de esta posible crisis de alimentos, las personas encuestadas indicaron que es un crisis producto de la inflación y de la guerra entre Ucrania y Rusia, ambas con 44% de las menciones. La tercera razón se sitúa en la crisis económica mundial (42%), seguido del aumento de precios de los combustibles y energías en general (36%).
Además, un 85% cree que esta crisis afectará mucho a Chile, mismo porcentaje para Latinoamérica, y un 77% dijo que tendrá efectos negativos para ellos y su familia.
Para enfrentar esta situación, la medida más respaldada por las y los encuestados nacionales es que el Gobierno obligue a congelar el precio de algunos alimentos (34%), seguido de la entrega de subsidios a las familias para poder enfrentar el alza en los precios (32%). En tercer lugar, un 21% respalda la idea de que las empresas reduzcan sus márgenes de utilidad para poder evitar este aumento en el valor de la mercadería.
“La crisis alimentaria se ha ido instalando en la mente de las personas como una fuente de incertidumbre para el corto plazo, observando posibles efectos negativos no solo en la generalidad, ya sea continente o país, sino en el cotidianeidad, en el propio hogar. Y junto con la incertidumbre aumenta la expectativa de ayuda. Principalmente se instala la expectativa de congelamiento de precios y con transferencias directas por parte de Gobierno. Pero también sobre la responsabilidad que tendrá la empresa privada en el apoyo al país y a sus clientes en una etapa de crisis donde tienen un rol importante que jugar”, comenta Alejandra Ojeda, Gerenta de Estudios Públicos de Ipsos Chile.
En el caso que esta crisis afecte a Chile, tanto en escasez de productos como con un alza importante en los precios, la principal estrategia para afrontarla será la búsqueda de alternativas de productos más baratos en lugares como ferias libres o supermercados mayoristas, lo que es mencionado por el 63% de las personas encuestadas. Otras estrategias que desarrollarían las personas serían disminuir la cantidad de consumo de productos (33%), comprar al por mayor o juntarse con otras personas para obtener mejores precios (31%), acomodar la dieta para consumir otro tipo de productos (30%) o disminuir la calidad de los productos consumidos (29%).
Por otro parte, frente a la posibilidad de que el precio del pan siga al alza, un 34% de las personas consultadas señala que compraría harina para hacer su propio pan y un 30% dijo que consumiría menos cantidad.
En relación a cuáles negocios se verían mayormente afectados por esta crisis, un 84% señala que los almacenes y negocios de barrios serían los más golpeados por esta situación, y un 69% menciona a las ferias libres. Además, 70% cree que los supermercados tendrán las mayores alzas en sus precios, mientras un 59% cree que eso pasará en los negocios de barrio.
“Las personas está dispuestas a hacer acomodos para afrontar posible escasez y aumento de precios. Entre estos se encuentran los cambios de canales de venta, la forma de comprar o incluso hacer modificaciones de productos y de calidad. Las empresas deberán estar atentas a los cambios de comportamiento de los consumidores y realizar los ajustes necesarios para ofrecer alternativas que mantengan la lealtad de sus clientes”, indica Alejandra Ojeda, Gerenta de Estudios Públicos de Ipsos Chile.
